Pie de Limón
Octubre 15 / 2020Cuando estaba empezando a estudiar pastelería estaba obsesionada con el concepto del clásico pastelero francés. Soñaba con postres elegantes y complejos, decorados con glaseados de espejo y rellenos con cremas hechas a base de pastas de avellanas y pistachos. Estudiaba día y noche temas y técnicas culinarias pasteleras y veía videos en Youtube todos los días de chefs franceses degustando y analizando sus creaciones.
Una vez uno de ellos dijo algo que resonó conmigo – “el azúcar es igual que cualquier otro condimento o especia, se debe usar con intención y con medida”. Verdad ABSOLUTA.
Mi debilidad son las cosas dulces pero es raro porque me gustan los postres y las cosas dulces pero no me gusta cuando hay un exceso de dulce solamente porque sí. Cuando escuché esa frase entendí que lo que no me gusta es el exceso de dulce y no poder sentir sabores.
Un postre no necesita miles de pasos o ingredientes caros para ser un buen postre o bien capas y capas de chocolate y caramelo y leche condensada y galleta y helado y nueces caramelizadas y dulce de leche…etc.
Lo que si se ocupa es un buen balance de sabores, dulzura y texturas. Obvio no está mal de vez en cuando explorar nuevas técnicas o lucirnos con algo que nos tomó varios días preparar pero en general si se cumple con esas tres condiciones va a ser delicioso por más sencillo que sea. Ejemplos clásicos son el pie de manzana o bien el pie de limón.
A absolutamente todo el mundo le gusta el pie de limón y es facilísimo de hacer. La clave de su éxito está en esas tres condiciones que mencionamos anteriormente.
Es ácido y dulce a la vez, es cremoso y firme, la base de galleta es dulce y crocante y la mantequilla le da un sabor cremoso y salado a la vez. El merengue con el que se decora es aireado lo cual contrasta con el relleno cremoso y aporta una segunda capa de dulce con sabor a azúcar caramelizado que hace que todo se balancee.
Con todo esto en mente les dejo mi receta para pie de limón. Se puede hacer rápidamente en una tarde pero eso sí, se debe refrigerar por lo menos 4 horas antes de poderlo desmoldar y porcionar.
Este pie es pequeño, pero fácilmente se puede duplicar la receta para hacer uno en un pyrex o molde redondo más grande.
Pie de limón
Receta para 6 personas
Tiempo de preparación: 60 minutos
Dificultad:
Ingredientes
Para la base
170 g de galleta maría hecha polvo
½ barra de mantequilla
Para el relleno
½ taza de jugo de limón
1 Cda de ralladura de limón
1 taza de leche condensada
3 yemas de huevo
1/3 taza de yogurt natural
Para el merengue
4 Cdas de clara de huevo
2/3 taza de azúcar blanco
1 Cda de agua
Procedimiento
Precalentamos el horno a 350ºF (180ºF).
Tenemos que derretir la mantequilla en un tazón apto para el microondas. La agregamos a la galleta en polvo y mezclamos hasta que tenga una textura arenosa.
Engrasamos ligeramente los costados de un molde de 18 cm de diámetro. Colocamos la mezcla de galleta en el fondo y presionamos para formar una base.
Para el relleno mezclamos la leche condensada con la ralladura y jugo de limón, las yemas y el yogurt hasta que se vea homogéneo. Colocar sobre la base de galleta en el molde y llevar al horno durante 30 minutos.
Debe sentirse semi firme a la hora de sacarlo del horno. Dejar enfriar a temperatura ambiente y luego refrigerar durante mínimo 4 horas antes de desmoldar y decorar.
Para hacer el merengue colocamos en un sartén pequeño u ollita dos terceras partes del azúcar y la cucharada de agua.
Lo llevamos a hervor a fuego medio y dejamos que se forme un almíbar espeso y burbujeante.
Mientras tanto vamos a colocar las claras de huevo en un tazón muy limpio y sin rastros de grasa. Agregamos el azúcar restante a las claras y con una batidora batimos hasta ir formando picos suaves.
Vamos a usar un tenedor para hacer burbujas de azúcar como si estuviéramos haciendo burbujas de jabón. Si soplamos y se forman burbujas de azúcar fácilmente el almíbar está listo para agregarse a las claras.
Todo este tiempo se tienen que mantener batidas las claras. Vamos agregando el almíbar a las claras en un chorrito constante mientras batimos y movemos constantemente.
Vertemos todo el almíbar y seguimos batiendo hasta que el merengue se sienta casi a temperatura ambiente, se vea liso y muy brillante.
Decoramos el pie con el merengue, si queremos se puede quemar un poco con la ayuda de un soplete de cocina.